La cantidad de peso que se puede perder al comer de 300 a 500 calorías diarias durante una semana varía según el nivel de actividad, la altura y el peso. Sin embargo, comer una cantidad tan pequeña de calorías puede provocar náuseas, diarrea, fatiga, estreñimiento y formación de cálculos biliares, y puede hacer que el cuerpo retenga la grasa.
Según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU., el número más bajo de calorías que una mujer debe consumir cada día es de 1.000 calorías, y los hombres no deben restringir su ingesta calórica por debajo de las 1.200 calorías diarias. Comer muy pocas calorías puede hacer que el cuerpo entre en modo de inanición, lo que significa que no se produce ninguna pérdida de peso. La pérdida de peso lenta y constante es el enfoque más seguro y saludable con el objetivo de perder de 1 a 2 libras por semana.