Las picaduras de hormigas de fuego rojo son típicamente rojas y se parecen a las colmenas, según WebMD. Debido a la picadura, las picaduras pican y arden. Algunas picaduras se pueden llenar con pus y se vuelven dolorosas al tocarlas.
Para tratar las picaduras de hormigas rojas, se puede aplicar hielo o ungüentos contra la picazón para aliviar la picazón y el dolor, de acuerdo con Healthline. Rascarse las picaduras aumenta el riesgo de infección. Las picaduras deben sanar en una semana por sí mismas.
En algunos casos, las toxinas pueden desencadenar una reacción alérgica grave, especialmente si las hormigas atacan en un enjambre o muerden varias veces, advierte Healthline. Los síntomas incluyen dificultad para respirar, mareos y náuseas. La reacción alérgica suele manifestarse poco después de que se producen las picaduras iniciales.
Las hormigas rojas de fuego son extremadamente agresivas y atacan en grandes cantidades, informa Healthline. Se sabe que pululan superficies verticales para defender sus nidos. Cada hormiga roja de fuego puede picar varias veces y anclarse en su lugar al morder la piel. Algunos nidos pueden contener hasta 200,000 hormigas.
Las hormigas rojas de fuego son extraordinariamente invulnerables, dice Healthline. No pueden ahogarse y sobrevivir en temperaturas tan bajas como menos 10 grados Fahrenheit. Si bien prefieren comer otros insectos, también pueden comer otros animales y cultivos para sobrevivir.