Los problemas de la piel más comunes en los gatos incluyen infecciones por hongos, dermatitis alérgica, alopecia, ácaros y úlceras en la piel. Estas condiciones suelen ser fáciles de tratar, pero se debe consultar a un veterinario acerca de cualquier anomalía de la piel, ya que ignorarla a menudo conduce a infecciones bacterianas además del problema de la raíz. Muchas de estas condiciones se manifiestan al rascarse con frecuencia.
Varias infecciones por hongos causan problemas en la piel de los gatos. La tiña es bastante contagiosa y se puede propagar a otros animales y humanos. Causa una lesión circular escamosa y calva. Las infecciones por hongos son más comunes en los gatos con otras afecciones de salud y con frecuencia afectan los oídos.
Las reacciones alérgicas al medio ambiente, los alimentos, las pulgas o los productos de aseo pueden causar erupciones y picazón. Lesiones e infecciones de la piel pueden seguir. Es importante averiguar a qué reacciona el gato y eliminar la exposición a él. También hay medicamentos disponibles para aliviar los síntomas.
La alopecia, o pérdida de cabello, es un problema común de la piel del gato. Si un gato tiene parches de calvicie o arroja una cantidad anormal de cabello, se sospecha alopecia debido al estrés o la enfermedad. Las pulgas, las alergias o la mala nutrición pueden ser las culpables.
Los ácaros del oído son parásitos que invaden las orejas de un gato y se alimentan de la cera y los aceites que encuentran. La inflamación resulta y conduce a una intensa picazón. La infección de la piel y el oído sigue. Los síntomas incluyen descarga y agitación de la cabeza.
Las úlceras o lesiones que se encuentran con mayor frecuencia en la cara del gato, las almohadillas de los pies o los muslos suelen deberse a una reacción alérgica llamada granuloma eosinófilo. Esta afección a veces es causada por alergias alimentarias o pulgas, pero la infección bacteriana también es un posible culpable. El tratamiento depende de la causa de las úlceras.