Algunos signos tempranos de un inminente ataque cardíaco incluyen dificultad para respirar, molestias en el pecho, náuseas y sudoración, junto con molestias en otras áreas de la parte superior del cuerpo como la espalda, el cuello o la mandíbula, según lo declarado por el estadounidense Asociación del corazón. No todas las personas experimentarán cada uno de estos síntomas, y algunas veces los síntomas desaparecen y reaparecen varias veces.
Dado que la enfermedad coronaria es la principal causa de muerte en los Estados Unidos, comprender cómo detectar los síntomas de un ataque cardíaco puede salvar una vida. Los avances médicos han hecho que el tratamiento de los ataques cardíacos sea más efectivo que nunca, pero en la mayoría de los casos, la ayuda se debe administrar rápidamente para prevenir el daño cardíaco a largo plazo.