Los dos tipos de smog son sulfurosos y fotoquímicos. El smog se define como el aire contaminado de toda la comunidad. El nombre se deriva de las palabras humo y niebla.
El smog sulfuroso también se conoce como "smog de Londres". Este tipo de smog es el resultado de un alto volumen de óxidos de azufre que se encuentran en el aire. El smog sulfuroso es el resultado de la quema de combustibles fósiles que contienen azufre. Un ejemplo de este tipo de combustible fósil es el carbón.
El smog fotoquímico también se llama "smog de Los Ángeles". Este tipo de smog es el resultado de los óxidos de nitrógeno y vapores de hidrocarburos que salen de los vehículos. El smog fotoquímico puede reducir la visibilidad y causar irritación ocular y dificultad respiratoria.