Algunos tipos diferentes de anticoagulantes son la warfarina y la heparina. Los anticoagulantes son medicamentos que pueden prevenir o tratar la formación de coágulos sanguíneos. Un coágulo de sangre puede llevar a complicaciones graves, como un ataque cardíaco o un derrame cerebral, afirma el Instituto Nacional de Salud.
Se pueden formar coágulos de sangre en personas que pueden tener un flujo sanguíneo deficiente o algún tipo de enfermedad cardíaca. Los coágulos de sangre pueden obstruir el flujo de sangre a través de las arterias y vasos. Para prevenir o tratar los coágulos de sangre, la warfarina es un anticoagulante ampliamente recetado, informa el NHS
Algunas afecciones que pueden requerir este medicamento recetado son defectos cardíacos congénitos de fibrilación auricular, afirma el Instituto Nacional de Salud. Algunos riesgos o efectos secundarios de tomar un anticoagulante son moretones y hematuria.