Las señales de advertencia de un mal funcionamiento de la derivación incluyen fiebre, irritabilidad, dolores de cabeza, un cambio en la personalidad y enrojecimiento o inflamación en el recorrido de la derivación, según la Asociación de Hidrocefalia. Además, algunos signos son específicos a determinados grupos de edad, como el agrandamiento de la cabeza del bebé en bebés, dificultad para despertarse en niños y adultos, e incontinencia urinaria en pacientes ancianos. Un mal funcionamiento repentino de la derivación es una condición grave que puede llevar al coma o la muerte.
Una derivación ventriculoperitoneal o VP es un dispositivo implantado quirúrgicamente en un ventrículo cerebral como una opción de tratamiento para la hidrocefalia, explica Healthline. La hidrocefalia es una afección que se caracteriza por una acumulación excesiva de líquido cefalorraquídeo en los ventrículos del cerebro debido a una sobreproducción o una mala absorción de LCR o un bloqueo como un tumor o quiste. La derivación VP desvía el exceso de líquido cefalorraquídeo de los ventrículos y reduce la presión perjudicial sobre el tejido circundante.
El procedimiento de colocación de la derivación VP dura aproximadamente una hora y media con el paciente bajo anestesia general, observa Healthline. El tiempo de recuperación de la colocación generalmente toma de tres a cuatro días, y la mayoría de los pacientes salen del hospital una semana después de la cirugía. El sistema de derivación tiene éxito en reducir la presión en los ventrículos del cerebro. Sin embargo, necesita un seguimiento frecuente, seguimientos y un reemplazo después de unos años.