A partir de 2015, no existe cura para la neuropatía periférica o el daño nervioso; sin embargo, el dolor causado por el daño nervioso se puede manejar con fisioterapia y ejercicios de acondicionamiento, de acuerdo con Spine-health. Los pacientes también pueden beneficiarse de ver a un psicólogo para controlar las respuestas emocionales al dolor, incluida la depresión.
Las personas que sufren de neuropatía periférica deben seguir un plan de alimentación saludable, hacer ejercicio con regularidad y evitar el consumo excesivo de alcohol o fumar, según la Clínica Mayo. La neuropatía es común entre los diabéticos, pero controlar los niveles de azúcar en la sangre, mantener la higiene adecuada de los pies y revisar las llagas y heridas a diario puede ayudar a controlar el dolor neuropático.
Los métodos alternativos de tratamiento, que no están probados médicamente, incluyen la acupuntura, las hierbas y una variedad de suplementos, afirma la Clínica Mayo. La acupuntura realizada por un profesional certificado es generalmente una práctica segura que consiste en insertar varias agujas finas en varios puntos del cuerpo. El ácido alfa lipoico y los aminoácidos como la acetil-L-carnitina pueden mejorar los síntomas de la neuropatía; sin embargo, los efectos secundarios pueden incluir erupción cutánea, náuseas y malestar estomacal.
Los ácidos grasos omega-3 que se encuentran en el aceite de pescado son conocidos por reducir la inflamación y mejorar el flujo sanguíneo, y las hierbas como el aceite de onagra también pueden ayudar con el manejo del dolor, señala Mayo Clinic. Un paciente debe consultar a un médico antes de tomar cualquier hierba o suplemento, ya que pueden interactuar con otros medicamentos.
