Algunos posibles efectos secundarios después de la extirpación de los ganglios linfáticos incluyen la acumulación de líquido en el sitio de la cirugía y la infección, según WebMD. También puede ocurrir hinchazón de las extremidades, entumecimiento y deterioro de la piel.
La mayoría de las personas se someten a una cirugía y extracción de los ganglios linfáticos para ver si hay una propagación del cáncer en todo el cuerpo, explica WebMD. Algunos de estos ganglios linfáticos están cerca de la superficie del cuerpo, pero otros están más adentro del abdomen o alrededor de órganos como el hígado o el corazón. La razón principal para este tipo de cirugía es extirpar el cáncer que se ha introducido en los ganglios linfáticos y evitar que se propague a otras áreas del cuerpo.
En la mayoría de los casos, los pacientes se someten a anestesia general para la cirugía de extracción de ganglios linfáticos, afirma WebMD. Una incisión entra en la piel sobre los ganglios linfáticos cancerosos. El tipo de incisión y la profundidad dependen de una serie de factores, incluida la ubicación de los ganglios linfáticos. Además de extraer los ganglios linfáticos, también sale otro tejido. La recuperación después de la cirugía depende del sitio y la extensión de la cirugía. Este tipo de cirugía puede curar algunos tipos de melanoma, pero solo los tipos que se propagan a los ganglios linfáticos se pueden tratar de esta manera.