La carnívora atrapamoscas de Venus tiene algunas adaptaciones muy únicas y útiles, como digerir animales pequeños, como moscas y arañas, para obtener nutrientes que no pueden absorber a través de los suelos pobres en sus hábitats nativos. Además, Las trampas para moscas de Venus han adaptado los pelos del gatillo en el interior de sus trampas; cuando se desencadena por un error, la trampa se cerrará de golpe, haciendo imposible el escape.
Entre las muchas adaptaciones interesantes que las trampas para moscas de Venus han desarrollado para prosperar en su entorno nativo y pantanoso está la capacidad de pasar largos periodos sin "comer", lo que facilita la supervivencia de la planta en ausencia de una nutrición adecuada. La trampa de Venus también ha adaptado diferentes mecanismos para hacer frente a los cambios de estaciones, incluidas las trampas especializadas para los meses de verano y primavera, y la capacidad de permanecer latente durante los meses fríos de invierno, cuando la actividad de los insectos es mínima.
Las trampas para pájaros Venus no comen carne por diversión; más bien, es una adaptación que es tan importante que las personas que desean mantener las trampas para moscas de Venus en sus hogares deben tener cuidado con la forma en que cultivan las macetas y las alimentan. Como plantas domésticas, las trampas para moscas no se pueden colocar en macetas en el suelo de macetas normal, y nunca deben ser fertilizadas. Mantener la planta viva en un entorno doméstico normal puede requerir alimentar a la planta colocando materiales digestibles (incluidos insectos recién capturados) en sus trampas.