Los experimentos con tubos de rayos catódicos de Thomson fueron una serie de tres pruebas que determinaron la existencia de electrones. Thomson utilizó los experimentos, comenzando con su invención del tubo de rayos catódicos, para comprender mejor las características átomo.
Thomson comenzó sus experimentos construyendo un tubo de rayos catódicos para medir la electricidad y el magnetismo. Demostró que las cargas negativas, los electrones y las cargas positivas están relacionados. Su segundo experimento involucró un tubo de rayos catódicos modificado con un revestimiento fluorescente, vacío y dos placas eléctricas, y además demostró la existencia de los electrones. El último experimento de Thomson presentó la innovadora idea de que los rayos catódicos están formados por partículas dentro del átomo.