Niels Bohr investigó la estructura del átomo y ganó el Premio Nobel de Física en 1922 por descubrir el modelo de Bohr. Desarrolló el modelo de gota líquida del núcleo atómico, propuso la idea de complementariedad e identificó el isótopo U-235 esencial para la fisión nuclear. Después de huir de la invasión alemana de Dinamarca, trabajó en el desarrollo de la bomba atómica en Los Alamos en los Estados Unidos.
El modelo de Bohr propone que los electrones orbitan el núcleo debido a las fuerzas electromagnéticas en lugar de a la gravedad. Debido a esta diferencia, los electrones no se colapsan en el núcleo sino que viajan de una capa orbital a otra a medida que cambian los niveles de energía.
Como ciudadano danés, Bohr se resistió a participar en la investigación de la energía nuclear alemana y ayudó a muchos científicos judíos a escapar del poder nazi. Huyó de Dinamarca en 1943 y finalmente se dirigió a Londres, donde participó en experimentos para una bomba de fisión nuclear viable.
Bohr insistió en que la investigación atómica debería compartirse, lo que provocó que Winston Churchill lo viera como un riesgo de seguridad. Organizó la Conferencia Átomos por la Paz en Ginebra en 1955.
El hijo de Bohr, Aage, Niels Bohr también contribuyó al mundo de la física. Aage ganó el Premio Nobel de Física en 1975.