Desde 206 a. C. A 221 A.D., la dinastía Han vio avances en tecnología, filosofía y comercio. Sin embargo, las influencias internas y externas causaron el colapso de la Dinastía Han en el año 22 DC aproximadamente. Las razones del colapso de esta dinastía china van desde los gobernantes apáticos hasta la agresión de las hordas externas. Como resultado de su colapso, China se dividió en los Tres Reinos y no se volvería a reunir por otros 400 años.
Internamente, la dinastía Han comenzó a desmoronarse cuando fue gobernada por emperadores que gobernaron para su propia diversión. La búsqueda de poder entre eruditos y generales llevó a masacres dentro del palacio.
La economía tomó una espiral descendente cuando los ingresos fiscales alcanzaron un punto bajo. Los académicos se habían declarado exentos de impuestos, y los campesinos evadieron a los recaudadores de impuestos corriendo hacia el campo. La falta de dinero de los impuestos llevó a un fondo militar agotado.
Con un presupuesto militar debilitado, el ejército no estaba bien equipado para defenderse contra amenazas externas. Las incursiones de pueblos nómadas, como los mongoles, eran comunes en China durante esa época. El gobierno de Han no tenía los recursos necesarios para pagar a todos los caudillos nómadas que se encontraron. En última instancia, las Guerras Sino-Xiongnu del 133 a. C. a 89 A.D. llevó a la desestabilización del gobierno de Han.