De acuerdo con los Institutos Nacionales de la Salud, los niveles normales de las pruebas de glucosa en sangre en ayunas se encuentran entre 70 y 100 miligramos por decilitro, y un nivel de prueba de glucosa en sangre al azar normal es inferior a 125 miligramos por decilitro. Los resultados pueden variar ligeramente según el laboratorio, pero los resultados se utilizan para determinar si un paciente tiene riesgo de diabetes o qué tan bien se mantiene su diabetes.
Los Institutos Nacionales de la Salud declaran que un recuento de niveles de glucosa en sangre más alto de lo normal puede ser el resultado de pancreatitis, cáncer de páncreas, tumores raros, una glándula tiroides hiperactiva, el síndrome de Cushing o el glucagonoma. Un recuento bajo de niveles de glucosa en la sangre puede ser causado por una glándula tiroides poco activa, malnutrición, demasiada medicación para la diabetes o insulina, hipopituitarismo o una enfermedad rara llamada insulinoma. Los niveles de azúcar en la sangre se determinan extrayendo sangre de una vena en el interior del codo o en el dorso de la mano. Los técnicos luego miden la glucosa contenida en la parte del plasma de la sangre.
Los Institutos Nacionales de la Salud también señalan que un recuento alto de azúcar en la sangre puede ocurrir temporalmente debido a factores estresantes graves, como accidentes cerebrovasculares, ataques cardíacos, cirugía o traumas físicos. Los medicamentos que no sean para la diabetes, como los medicamentos para tratar la psicosis y la esquizofrenia, también pueden elevar los niveles de glucosa. Los medicamentos como el alcohol, el paracetamol y los inhibidores de la monoaminooxidasa pueden disminuir los conteos de azúcar en la sangre.