El trabajo en equipo es importante porque afecta la calidad general de los proyectos, la moral de un grupo en su conjunto y la experiencia de aprendizaje para los individuos involucrados en un proyecto. El trabajo en equipo también puede afectar positivamente la retención de empleados y la creatividad de las ideas producidas.
El trabajo en equipo a menudo se percibe como un elemento positivo en el lugar de trabajo o en el aula académica porque permite a los miembros del grupo tener la oportunidad de compartir ideas, dividir la carga de trabajo y aprender cómo trabajar con otros. En lugar de abrumar a un individuo con un proyecto sustancial, un equipo puede realizar tareas delegando, dividiendo y compartiendo responsabilidades. Como resultado, los miembros del equipo pueden sentir que la carga de trabajo es más equilibrada, el proyecto es más diverso y el resultado es mucho más creativo. Los miembros del equipo que trabajan en un grupo también se ven obligados a interactuar entre sí y llegar a un consenso sobre las decisiones que afectan el proyecto. Esto enseña a otros a reconocer las fortalezas y debilidades dentro de los miembros del equipo, identificar los rasgos de personalidad dentro de sí mismos y de los demás, y diseñar estrategias para elevar la moral del grupo. Trabajar en equipo obliga a los miembros a pensar más allá de sus preferencias personales y trabajar por el bien de todo el equipo.