La función de los carpals es permitir el movimiento fácil y libre de la muñeca. Hay ocho huesos del carpo: el escafoides, el capitate, el trapecio, el trapezoide, el lunate, el triquetral, el pisiforme y el hamate.
Los huesos del carpo se articulan con el radio y el cúbito, que son los huesos largos en el antebrazo de una persona. Parte de la función de los carpals es también facilitar el movimiento de estos dos huesos, así como el movimiento de las manos. Esto se hace a través de los arreglos de músculos, ligamentos y tendones que conectan las carpas con los otros huesos.