Los pacientes que suspenden el tratamiento de diálisis tienen una expectativa de vida de una semana a varias semanas, señala la National Kidney Foundation. La expectativa de vida depende de la cantidad de función renal que permanece junto con la situación médica general del paciente.
Según la National Kidney Foundation, los pacientes pueden optar por interrumpir el tratamiento si sienten que no está ayudando a su calidad de vida. Los pacientes deben discutir la decisión con su médico y sus seres queridos. Un médico puede hacer cambios que mejoren el resultado del tratamiento. La muerte por insuficiencia renal suele ser indolora; Sin embargo, a los pacientes con dolor se les puede recetar medicamentos. Sin diálisis, los líquidos pueden acumularse en el cuerpo, causando cansancio y dificultad para respirar. Un médico puede prescribir tratamientos para ayudar con estas condiciones.