El ruido es un sonido no deseado o desagradable. La clasificación del sonido como ruido es subjetiva; lo que puede contar como sonido para una persona o cultura puede contar como ruido para otra persona o cultura El sonido se puede clasificar como ruido en función de su magnitud, características, duración y tiempo de aparición.
La magnitud del sonido puede hacer que sea indeseable si molesta a las personas. La música a un volumen aceptable puede ser agradable, pero subir el volumen de la música demasiado alto hace que se convierta en una molestia.
La conveniencia subjetiva de los sonidos también puede clasificarlos como ruidos. Varias personas que conversan en una sala pueden clasificar todas las conversaciones que no sean la suya como ruido.
El ajuste de ocurrencia también diferencia entre sonidos y ruidos. Los sonidos fuertes que ocurren en un ambiente socialmente aceptable, como un concierto de rock, pueden ser aceptables, mientras que incluso las conversaciones en voz baja se clasifican como ruido en una biblioteca o sermón religioso.
El tiempo de ocurrencia también diferencia entre sonido y ruido. El sonido del tráfico del mediodía puede ser aceptable, mientras que esta misma magnitud es intolerable en medio de la noche.
La duración de la aparición es el tiempo subjetivo después del cual escuchar un sonido repetitivo se vuelve molesto. Escuchar una canción una sola vez puede ser agradable, mientras que escuchar esta canción varias veces se convierte en una molestia, lo que lleva a su clasificación como ruido.
