Según la Enciclopedia Británica, una partícula beta puede tener una carga negativa (si es un electrón) o una carga positiva (un positrón). Las partículas beta son emitidas por núcleos atómicos inestables. La emisión de partículas beta se llama desintegración beta.
Las partículas radiactivas se dividen en tres grupos: alfa, beta y gamma. Estos grupos varían según el tamaño y los niveles de energía. La partícula alfa es comparativamente grande y no tiene suficiente energía para penetrar incluso en una hoja de papel. La partícula beta, más a menudo expresada como un electrón, transporta suficiente energía para penetrar en la piel humana. Las partículas gamma, aunque sin masa, tienen niveles extremos de energía y son peligrosas para el tejido biológico.