Los piojos se reproducen sexualmente, como ocurre con la mayoría de las especies de insectos. Los piojos machos y hembras adultos de la especie Pediculus humanus capitis son sexualmente dimorfos, con hembras algo más grandes que los machos, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Los piojos comienzan su vida incubando huevos, llamados liendres, que se cementan hasta la base de un solo cabello. Después de la eclosión, la ninfa muda tres veces durante los primeros siete días antes de llegar a la edad adulta, según los CDC. Los piojos adultos son insectos típicos ya que tienen seis patas y un cuerpo que se divide en tres secciones. Cada pata tiene un pie de garra especializado para agarrar con fuerza los cabellos del cabello.
Como adulto, el piojo busca pareja y compañeros. Un piojo hembra apareado pone hasta ocho nits al día. Cada liendre tarda entre seis y nueve días en incubarse, y dura hasta 30 días sin dejar la cabeza del huésped, según los CDC. Durante la fase reproductiva de su vida, un piojo adulto debe beber sangre varias veces al día o morir de hambre en la cara, que generalmente mata al parásito dentro de las 48 horas de la separación de su huésped.