Las cacatúas adultas son más brillantes y de colores más vibrantes, con cabezas de colores brillantes y parches en las mejillas definidos y contrastados. Las hembras son ligeramente más apagadas, con parches menos definidos en las mejillas.
Las cacatúas inmaduras son más difíciles de determinar el sexo porque son visualmente idénticas hasta que tienen su primera muda. Tanto los pájaros machos como las hembras en esa etapa tienen coloración femenina.
Ciertos patrones de color para el ave también hacen que la determinación visual del sexo sea imposible. Las cacatúas de patrón Lutino se ven idénticas sin importar el sexo. Las aves de varios colores tampoco son sexualmente dimorfas en lo que respecta a la coloración. Los lutinos son amarillos o amarillos con torsos blancos, y los pieds tienen manchas blancas en todo el cuerpo.
El patrón de cara blanca carece por completo de parches en las mejillas, pero los machos pueden distinguirse fácilmente de las hembras ya que los machos tienen un área más grande de blanco en la cara.
La palpitación de las caderas del ave puede ayudar a resolver la confusión sobre el sexo del ave. La pelvis de una hembra es generalmente más ancha y más flexible para permitir el paso de los óvulos. Una pelvis masculina se sentirá más estrecha, rígida y puntiaguda.
Cuando todo lo demás falla, las pruebas de ADN pueden determinar el sexo del ave. Se pueden llevar algunas plumas a un veterinario que se especialice en el tratamiento de las aves. Se recomiendan las plumas recién arrancadas, ya que las mudas no tienen suficiente ADN.