Las personas con dientes oscuros, encías sensibles e inflamadas, acné persistente en las encías, sensibilidad extendida al frío o al calor en la boca, o que experimentan dolor intenso al masticar presentan síntomas que indican que puede ser necesario un conducto radicular. El diagnóstico incluye una radiografía de los canales radiculares, de acuerdo con WebMD.
El propósito de las imágenes de rayos X de los canales radiculares es detectar una infección en el hueso alrededor de los canales. Después de la radiografía, la anestesia adormece la boca alrededor del diente antes de perforar un orificio para permitir el acceso al interior del diente afectado. El dentista retira la pulpa interior, cualquier bacteria, los nervios muertos y cualquier otro residuo del diente antes de usar una serie de limas para limpiar los lados del canal de la raíz, enjuagando ocasionalmente con hipoclorito de sodio o agua, como lo indica WebMD.
