La levadura metaboliza el azúcar dividiendo los azúcares de seis carbonos en dos moléculas de piruvato, luego dividiendo las moléculas de piruvato eliminando el dióxido de carbono de ellos y finalmente agregando iones de hidrógeno para crear moléculas de etanol. se conoce como fermentación y se realiza en ausencia de oxígeno.
La levadura produce energía fermentando las moléculas de azúcar, pero este proceso es muy ineficiente en comparación con la respiración celular que usa oxígeno. No obstante, permite que las levaduras sobrevivan donde muchos otros organismos no podrían. Las levaduras utilizan la fermentación cuando es posible, incluso cuando hay oxígeno disponible. El proceso de fermentación del etanol es la forma en que se crea el alcohol en las bebidas alcohólicas. Las levaduras y muchos otros organismos producen etanol y dióxido de carbono como productos de desecho finales de la fermentación.
Otros organismos utilizan diferentes tipos de fermentación, que tampoco requieren oxígeno, sino que crean diferentes productos de desecho. Otro tipo muy común de fermentación es la fermentación con ácido láctico. Este tipo de fermentación es realizada por muchos tipos de bacterias, así como por los músculos de los animales en ausencia de suficiente oxígeno. Este es el tipo de fermentación que utilizan las bacterias para convertir la leche en yogur. Algunas bacterias crean ácido láctico, pero también procesan parte del ácido láctico en etanol, creando así ambos productos de desecho.