A partir de 2015, un láser prueba los niveles de glucosa al penetrar en la palma y golpear las moléculas de azúcar, que luego absorben parte del rayo, explica Medical News Today. A diferencia de los medidores de glucosa tradicionales, que miden los niveles de azúcar en la sangre, el láser mide el azúcar en algo llamado líquido intersticial dérmico, que es el líquido entre las células.
El láser usa un rayo en el rango medio de la luz infrarroja que no reacciona a otros químicos en la piel, dice Medical News Today. Un láser que utiliza esta longitud de onda necesita más potencia y mayor estabilidad para penetrar en la piel. Un nuevo tipo de láser llamado láser de cascada cuántica proporciona la estabilidad y la potencia necesarias. Inicialmente, el láser requería un sistema de enfriamiento elaborado, pero ahora funciona a temperatura ambiente. Sin embargo, el dispositivo todavía es demasiado grande para uso doméstico.
Se requiere que los medidores de glucosa tradicionales tengan al menos un 80 por ciento de precisión, y la versión más reciente del láser tiene un 84 por ciento de precisión, señala Medical News Today. Un estudio inicial de tres sujetos reveló que las lecturas promedio del láser no eran tan precisas como un medidor de glucosa estándar, pero estaban dentro del rango aceptable. El uso de este nuevo tipo de láser para aplicaciones médicas puede no limitarse a evaluar los niveles de glucosa.