Los pacientes pueden crear un baño de sales de Epsom agitando 2 tazas de sales de Epsom en un baño de agua tibia y remojar en la mezcla durante al menos 12 minutos, explica SaltWorks. Para obtener beneficios humectantes adicionales, se puede agregar 1/2 taza de aceite de oliva o aceite para bebé para el baño.
Las salsas de sal de Epsom tienen varios usos, de acuerdo con SaltWorks. Se utilizan para ayudar a aliviar los síntomas del pie de atleta e incluso pueden aliviar el dolor de esguinces y magulladuras. Los baños de sal de Epsom pueden disminuir la inflamación asociada con la gota y pueden usarse para tratar hongos en las uñas. Algunas personas encuentran que remojar sus pies en sales de Epsom ayuda a eliminar el olor de los pies. El jabón nunca debe agregarse a un baño de sal de Epsom, ya que puede interferir con la acción de las sales. Sin embargo, los aceites esenciales, como la menta, se pueden agregar a la bañera si se desea.
Las sales de Epsom contienen iones de magnesio que se absorben a través de la piel, explica SaltWorks. Estos iones pueden ayudar a disminuir la presión arterial, aumentar los niveles de energía y aliviar los calambres musculares. Para obtener los mejores resultados, se recomienda a los pacientes que se remojen en un baño de sal de Epsom al menos tres veces por semana. Aquellos que usan sales de Epsom para tratar hongos en las uñas pueden remojar sus pies hasta tres veces por día.