Streptococcus mutans ingresa a la cavidad oral humana poco después del nacimiento y ataca los dientes a través de la producción de ácido. Esta bacteria es el principal agente de formación de la cavidad dental. Prospera con los carbohidratos y secreta un poderoso ácido anaeróbico que destruye el esmalte dental. Streptococcus mutans no necesita oxígeno y florece en los huecos más profundos entre los dientes y las encías.
Las concentraciones más altas de Streptococcus mutans se encuentran en la placa dental, un biofilm pegajoso que se forma en el esmalte dental. La limpieza dental profesional es la forma más efectiva de reducir la presencia de esta bacteria y el daño que causa. Los antibióticos orales no son confiables porque no penetran debajo de la superficie de los depósitos de placa.
Aunque es importante para la salud oral general, el cepillado dental y el enjuague bucal no son efectivos contra Streptococcus mutans. El xilitol, un edulcorante natural utilizado en la goma de mascar, neutraliza el ácido formador de cavidades. El fluoruro también combate los efectos de Streptococcus mutans al reforzar el esmalte dañado.
El bicarbonato de sodio es otro activo en la lucha con Streptococcus mutans. Aumenta el nivel de pH oral, neutralizando el ácido bacteriano. El bicarbonato de sodio también elimina la placa y mata varios tipos de bacterias orales. Muchas pastas de dientes comerciales contienen bicarbonato de sodio y fluoruro, pero las preparaciones caseras producen resultados comparables. Una pasta simple hecha en casa con agua fluorada y bicarbonato de sodio combate la halitosis, blanquea los dientes, elimina la placa y elimina las bacterias.