La principal forma en que el sistema endocrino afecta al sistema excretor es al controlar la cantidad de agua liberada con la orina. El sistema endocrino libera una serie de hormonas que hacen que los riñones reabsorban el agua de la orina los niveles de agua en la sangre son bajos.
El hipotálamo controla los niveles de electrolitos en la sangre. Una concentración creciente de electrolitos indica deshidratación, mientras que una concentración más baja puede indicar un exceso de hidratación. Las causas más comunes de deshidratación son la ingesta inadecuada de agua, la transpiración excesiva y la pérdida de sangre. Cuando el hipotálamo detecta que el cuerpo está deshidratado, produce hormona antidiurética que luego es transferida y liberada por la glándula pituitaria.
La hormona antidiurética circula hacia los riñones, donde hace que aumenten la velocidad a la que absorben el agua. Lo hace haciendo que los riñones formen canales de agua en los túbulos que se enrollan a través de los riñones. El agua que fluye de regreso al torrente sanguíneo causa una reducción de la hormona antidiurética hasta que los canales se cierran nuevamente.
Otra hormona que regula la forma en que los riñones absorben el agua es la aldosterona, que es producida por las glándulas suprarrenales. La aldosterona cambia la forma en que el cuerpo trata los químicos disueltos para afectar la absorción de agua por los riñones.
