Los efectos a largo plazo de la presión arterial alta en el cuerpo son peligrosos, ya que incluyen la posibilidad de insuficiencia cardíaca, accidente cerebrovascular e insuficiencia renal, según Healthline. La disfunción sexual y la osteoporosis también son posibles a lo largo del tiempo.
La presión arterial excesiva causa daños en las venas y arterias con el tiempo, lo que interfiere con el flujo de sangre en el cuerpo. Dentro de los vasos sanguíneos, la presión arterial alta hace que algunas arterias se estiren demasiado, causando desgarros y tejido cicatricial. Como resultado, las arterias se estrechan y tienen que trabajar más, lo que hace posible la insuficiencia cardíaca, señala Healthline.
Si los vasos sanguíneos estrechados se bloquean y la sangre deja de fluir hacia el cerebro, una apoplejía es una posible consecuencia, lo que lleva a un daño cerebral considerable. La presión arterial alta es el principal factor de riesgo para el accidente cerebrovascular. Los vasos sanguíneos estrechos también hacen que los riñones sean menos eficientes para filtrar las toxinas, y las cicatrices resultantes pueden terminar con la función renal, informa Healthline.