En la mitología griega, Medusa, la gorgona de pelo de serpiente, fue asesinada por Perseo. Perseo fue enviado a matarla por el Rey Polidectos, quien intentaba sacar a Perseo del camino para poder casarse con la madre de Perseo, Danae.
A Perseo se le dieron varias herramientas mágicas, como un casco con el poder de invisibilidad y un escudo encantado. Con estos implementos, pudo acercarse sigilosamente a Medusa y mirar dentro del escudo para verla sin convertirse en piedra. Luego, utilizó el casco de invisibilidad para escapar de las enfurecidas hermanas de Medusa. Cuando Perseo cortó la cabeza de Medusa, se crearon dos criaturas: Pegaso, un caballo alado, y Chrysaor, un gigante dorado. Perseo regresó a su reino natal, donde convirtió a Polidectos y sus seguidores en piedra con la cabeza de Medusa por acosar a su madre.