La superposición en el arte es la colocación de objetos unos sobre otros para crear la ilusión de profundidad. La pintura es una expresión artística bidimensional. Tiene longitud y anchura pero no tiene profundidad. Es necesario, por lo tanto, que los artistas proporcionen a los espectadores algún tipo de perspectiva para establecer el tamaño y la distancia en las pinturas. Aquí es donde la superposición entra en juego.
Si todo en una pintura fuera del mismo tamaño básico, sin superponerse, no habría manera de que los espectadores distingan detalles pequeños pero importantes, como quién o qué está más cerca o más lejos de los espectadores. La superposición convierte las pinturas en una especie de ventana al crear la ilusión de que hay un mundo entero dentro del lienzo y que los espectadores simplemente están vislumbrándolo. La superposición fue un aspecto de las obras de una forma de arte que surgió justo antes de la mitad del siglo 20, llamado expresionismo abstracto. Muchas pinturas expresionistas abstractas son simplemente una serie de líneas o formas superpuestas. La superposición también se puede utilizar para difuminar las líneas donde comienza una cosa y comienza otra. Los tres músicos de Pablo Picasso es un excelente ejemplo de esto. La famosa pintura cubista parece estar compuesta por recortes de papel posicionados para crear la ilusión de que los tres músicos se fusionan.