El oro es un mineral natural, lo que significa que no fue inventado. Fue descubierto. Hay evidencia de la utilización de oro que se remonta a la Edad del Cobre (aproximadamente 4000 aC).
La evidencia del conocimiento y uso del oro es ubicua, pero la primera persona en encontrarlo o usarlo es anterior a la historia. Muchos objetos de las civilizaciones antiguas están hechos de oro, como estatuas egipcias y sarcófagos. Múltiples textos religiosos también hacen referencia al oro y los artefactos hechos de él, como la Biblia cristiana. El proceso de refinación de oro se remonta a la antigua Roma y la invención de la minería hidráulica.