Los minerales que contienen silicio y oxígeno se llaman silicatos. En el manto y la corteza de la Tierra, los silicatos representan aproximadamente el 80 por ciento de su volumen. En la naturaleza, los silicatos son abundantes y pueden clasificarse según diferentes composiciones químicas y estructuras cristalinas.
Algunos de estos diferentes minerales de silicato son feldespato, cuarzo, micas, olivina, piroxeno y anfíbol. Estos silicatos tienen diferentes fórmulas químicas. Por ejemplo, mientras que el cuarzo tiene la fórmula química SiO2, el grupo olivino tiene la fórmula general (Mg, Fe) SiO4. De manera similar, la escisión de los silicatos está determinada por sus estructuras de cristal individuales. Por ejemplo, el feldespato tiene dos divisiones en ángulo recto, mientras que el cuarzo no tiene ninguno. La escisión es la tendencia de un mineral a romperse a lo largo de una superficie plana.