Los enemigos de una serpiente incluyen aves, mapaches, coyotes, mangostas, tortugas, cocodrilos y muchos otros animales. Algunas serpientes son devoradas por otras serpientes.
Las serpientes tienen varias adaptaciones para ayudarlas a esconderse o asustar a los depredadores. Algunas serpientes asustan a sus depredadores resoplando o silbando con fuerza. Las serpientes de cascabel sacuden sus colas para asustar a sus enemigos.
Algunas serpientes tienen colores o patrones que actúan como una forma de camuflaje, mientras que otras pueden esconderse debajo de las hojas o arena para esconderse de los depredadores.
Los humanos son una de las mayores amenazas para las serpientes adultas. Algunos humanos cazan serpientes para usarlas en cinturones, bolsos y zapatos. Otros capturan serpientes y las venden como mascotas. Los humanos también destruyen los hábitats de algunas serpientes.