Los síntomas asociados con la degeneración del disco L5-S1 son un dolor agudo y ardiente en la parte inferior de la espalda que posiblemente se irradia hacia la parte externa de la pierna, hormigueo o entumecimiento en el área asociada, dolor en el costado del pie y un reflejo del tirón del tobillo disminuido o ausente, de acuerdo con American Family Physician. Los síntomas avanzados incluyen debilidad muscular y mala función muscular en la pierna afectada.
Los síntomas exactos de la degeneración del disco L5-S1 varían según los nervios específicos afectados, informa Johns Hopkins Medicine. El dolor de la degeneración del disco a menudo empeora al toser, estornudar, moverse o permanecer de pie durante períodos prolongados. Un médico diagnostica la enfermedad del disco lumbar al completar un examen físico, incluidas las pruebas de reflejos y el uso de exploraciones, como radiografías, imágenes de resonancia magnética y tomografías computadas, para identificar la ubicación exacta y el tipo de problema del disco.
Los mielogramas y la electromiografía son pruebas especializadas que se utilizan para diagnosticar problemas de disco, explica Johns Hopkins Medicine. Durante una mielografía, un radiólogo inyecta un tinte en la columna vertebral. Una radiografía o una tomografía computarizada muestra la ubicación del tinte, brindando información detallada sobre las anomalías de la columna vertebral. Durante una electromiografía, los electrodos miden directamente la fuerza de la respuesta muscular. Esta prueba es útil para averiguar exactamente qué músculos se ven afectados por la degeneración del disco y la gravedad del problema.