Las células sanguíneas agrandadas, que los médicos denominan macrocitosis, pueden indicar la presencia de una enfermedad subyacente o una afección de salud, como deficiencia de vitaminas, hipotiroidismo, aumento de la producción de glóbulos rojos, enfermedad hepática y más. La macrocitosis también puede desarrollarse como respuesta del cuerpo a ciertos medicamentos, según la Clínica Mayo. También puede provenir del consumo excesivo de alcohol.
La macrocitosis no produce signos ni síntomas notables, señala Mayo Clinic, y puede que ni siquiera se detecte hasta que los pacientes se realicen un análisis de sangre de rutina. Sin embargo, el descubrimiento de la macrocitosis debería provocar pruebas adicionales, ya que la condición generalmente se debe a otras causas.
Las deficiencias de vitamina, específicamente de folato y vitamina B-12, producen glóbulos rojos que son más grandes de lo normal. Estas causas subyacentes se corrigen fácilmente con cambios en la dieta y suplementos. Las enfermedades hepáticas también pueden provocar el crecimiento de células sanguíneas grandes, al igual que la dependencia del alcohol. Al igual que con las deficiencias de vitaminas, la condición se corrige con el tratamiento de la causa subyacente.Ciertos medicamentos también crean células sanguíneas grandes. Los medicamentos para el cáncer, las convulsiones y las afecciones autoinmunes pueden causar el aumento de las células sanguíneas. La macrocitosis también puede surgir en respuesta a la pérdida de sangre o cuando la producción de células sanguíneas aumenta repentinamente, como cuando las personas desarrollan anemia.
Para evaluar las causas de la macrocitosis, los médicos generalmente realizan análisis de sangre más completos o extraen una porción de médula ósea para un análisis más detallado.