Chelonaphobia es el miedo a las tortugas. Hay muchas causas posibles para esta ansiedad, incluida la falta de familiaridad con los reptiles o una exposición aterradora a ellos. También es posible que las fobias como la quelonafobia se deban, en parte, a la genética.
La terapia de exposición es un tipo de tratamiento cognitivo-conductual que a veces se usa para superar miedos fuertes como los asociados con la quelonafobia. A través de este proceso, una persona afectada tiene interacciones seguras y repetidas con la fuente del miedo. La terapia consta de varias sesiones.
A veces se ve una respuesta más rápida con "inundaciones", que es un tratamiento que involucra rodear al individuo con la fuente del miedo, a menudo a través de descripciones verbales, durante horas hasta que se resuelva el miedo.