Las posibles causas de dolor en la caja torácica, que se produce sobre cada lado del ombligo y debajo del tórax, incluyen un músculo estirado, costillas magulladas, costillas rotas, lesión torácica o una fractura de costilla, afirma Healthline. Un cartílago de la costilla inflamado o el revestimiento del pulmón, espasmos musculares o enfermedad ósea también son causas potenciales.
El dolor en la caja torácica puede ocurrir inmediatamente después de una lesión, desarrollarse gradualmente o manifestarse sin una causa identificable, señala Healthline. El dolor puede indicar un ataque cardíaco inminente si se intensifica cuando una persona respira o se desplaza a una posición particular. Los síntomas de acompañamiento, como dolor o presión en el pecho, también indican un ataque cardíaco. Cualquier persona que haya sufrido recientemente una caída y experimente respiración dolorosa y hematomas notorios en el pecho necesita ayuda de emergencia.
Los médicos generalmente requieren una radiografía para diagnosticar el dolor en la caja torácica relacionado con una lesión, según Healthline. A veces ordenan pruebas de imagen más profundas, como una resonancia magnética, para examinar la caja torácica y las estructuras cercanas. Para determinar la causa del dolor crónico, los médicos realizan una gammagrafía ósea, que consiste en inyectar una sustancia radioactiva conocida como marcador. La prueba revela anomalías óseas, especialmente si una persona tiene cáncer de huesos.
"Las compresas frías y los analgésicos de venta libre ayudan a aliviar el dolor de la caja torácica que resulta de lesiones menores", explica Healthline. Los analgésicos recetados a menudo son necesarios para el dolor causado por una fractura de costilla.