Durante la Reforma, varios líderes clave, incluidos John Calvin, Henry VIII y Martin Luther, desafiaron la autoridad de la Iglesia Católica y crearon lo que se conoció como Protestantismo. La Reforma se produjo cuando estos líderes sintieron que no había una distribución justa de poder entre las personas en la iglesia y que algunas de las enseñanzas de la iglesia no podían justificarse usando la Biblia. Un punto clave de la Reforma ocurrió cuando el rey Enrique VIII se separó de la Iglesia Católica y estableció la Iglesia de Inglaterra.
Se considera que la Reforma Protestante comenzó en 1517 cuando Martín Lutero publicó sus "95 Tesis" cuestionando a la iglesia. Comúnmente se considera que terminó en 1555 en la Paz de Augsburgo. Esta cumbre permitió que la Iglesia Católica y la nueva Iglesia Luterana existieran pacíficamente en Alemania. La Reforma protestante tuvo como objetivo purificar la iglesia y crear nuevas iglesias que se centraran en la Biblia más que en la tradición.
Lutero fue especialmente importante en la Reforma porque fue la primera persona en utilizar la imprenta de una manera que permitía a la gente común acceder a sus pensamientos. El poder de la prensa difundió las ideas de Lutero de manera significativa. Publicó más obras religiosas de 1518 a 1525 que los otros 17 prolíficos reformadores combinados.