Lo que sucede cuando un gran terremoto, o "The Big One", golpea a Los Ángeles depende de dónde golpee el terremoto y qué tan fuerte es. Aún así, los científicos han desarrollado modelos y especulado sobre lo que podría suceder en el peor de los casos, y no es muy bonito.
El término "The Big One" puede significar muchas cosas diferentes, por lo que es importante separar la hipérbole de los hechos. El peligro de un gran terremoto en Los Ángeles, aparte de su fuerza, es la forma y la estructura de la cuenca de L.A. Esencialmente, Los Ángeles está rodeado de montañas que forman un gran tazón de roca. Durante millones de años, la roca y la arena se han acumulado en ese recipiente, y esa es la superficie compacta sobre la que descansa Los Ángeles. Es un poco como un cuenco de gelatina.
Cuando se produce un terremoto, sus ondas reverberarán, se balancearán y se agitarán mucho más en el tipo de terreno suelto de L.A. Este fenómeno, según afirma un estudio reciente de MIT y Stanford, podría ser el aspecto más desastroso de un terremoto en Los Ángeles. Estiman que Downtown L.A., el área con más rascacielos, sentirá el temblor tres veces más que otras áreas.
En 2008, cientos de científicos trabajaron en un informe exhaustivo que detallaba el impacto de un terremoto a escala 7.8. Estimaron que duraría tres minutos, o 15 veces más que el legendario terremoto de Northridge de 1994. Habría cerca de 1,800 víctimas, 50,000 heridos, 1,600 incendios y aproximadamente $ 200 mil millones en daños, en escala con el huracán Katrina. En otras palabras, puede que no sea la película "San Andreas", pero en algunos aspectos tampoco está muy lejos.
Si bien los sismólogos aún no pueden predecir los terremotos, ciertamente pueden ayudar a las ciudades a prepararse. Y este informe, sin lugar a dudas, ha empujado a los líderes a revisar la preparación de Los Ángeles. Como dicen: no se trata de "si", sino de "cuándo".