Stryker fabrica muchos sistemas de reemplazo de rodilla, y cada sistema está hecho de metales y componentes específicos de ese sistema. Mientras que el cromo-cobalto y el titanio son los más comunes, hay varios otros componentes que se pueden usar para hacer la prótesis.
Conocidas por su resistencia y resistencia a la corrosión, las aleaciones de cromo-cobalto se consideran metales biocompatibles, aunque existe una pequeña posibilidad de reacción alérgica en pacientes sensibles a metales como el níquel. El titanio puro se usa cuando la fuerza no es un factor importante. Las aleaciones de titanio también se usan en algunos sistemas de reemplazo de rodilla, y estas aleaciones comúnmente contienen aluminio y vanadio. Debido a la densidad y la naturaleza elástica del titanio y sus aleaciones, algunos riesgos asociados con el reemplazo de rodilla pueden reducirse.
Otros materiales menos usados incluyen tántalo, polietileno y circonio. Un material más nuevo es el circonio oxidado con oxinio, que es básicamente una aleación de metal transformado que tiene una superficie de apoyo de cerámica.
