Los instrumentos comúnmente utilizados para medir la velocidad del viento se conocen como anemómetros. Pueden presentar una veleta para ayudar a determinar la dirección del viento.
Los anemómetros se instalan comúnmente en estaciones meteorológicas y, por lo general, tienen varias copas hemisféricas unidas a brazos horizontales que giran cuando entran en contacto con el viento. Otros anemómetros determinan la velocidad del viento mediante el uso de una hélice. La velocidad de rotación de las copas o la hélice determina la velocidad relativa del viento. Algunos anemómetros científicos utilizan la velocidad del sonido para determinar la velocidad del viento, la presión del aire y la dirección del viento. Estos instrumentos científicos producen mediciones más precisas que los anemómetros de copa y de hélice.