Una sonrisa torcida es causada por un problema con el nervio facial. Tales problemas surgen debido a una infección, enfermedad, lesión o problemas de circulación, de acuerdo con el Centro Médico St. Vincent.
La infección más común que causa debilidad muscular que podría resultar en una sonrisa torcida es la parálisis de Bell, según el Centro Médico St. Vincent. La condición hace que el nervio facial se hinche, creando presión sobre el nervio. El tratamiento consiste en reducir la inflamación y fomentar la circulación normal. El herpes zoster ótico es una afección similar que puede causar una interrupción del nervio facial y pérdida de la audición.
La existencia o extirpación de un tumor acústico o de un crecimiento fibroso no maligno también puede causar una interrupción del nervio facial y provocar una sonrisa torcida.
La infección en el oído medio es otra causa potencial de una sonrisa torcida. La hinchazón causada por la infección puede crear presión sobre el nervio, lo que provoca una debilidad en la cara que se resuelve cuando la inflamación disminuye.
Por último, la interrupción de la circulación que resulta de un accidente cerebrovascular puede causar parálisis facial. Un derrame cerebral suele ir acompañado de varios otros síntomas.
Notas del St. Vincent Medical Center
