No hay cura para las aftas bucales. Sin embargo, hacer algunos cambios en la dieta y el estilo de vida puede reducir la frecuencia con la que ocurren, según WebMD. Se deben evitar los alimentos que irritan la boca, como las comidas picantes, las verduras ácidas y las frutas cítricas. La goma de mascar, que también irrita la boca, también debe minimizarse. La higiene dental también es clave, por lo que es importante cepillarse los dientes con un cepillo de cerdas suaves y usar hilo dental después de las comidas para eliminar cualquier alimento de la boca que pueda desencadenar una úlcera bucal.
Las úlceras bucales son úlceras superficiales en la boca que causan molestias. Las aftas bucales simples pueden aparecer alrededor de cuatro veces al año y durar hasta una semana. Por lo general, ocurren en personas de entre 10 y 20 años, afirma WebMD. Las úlceras complejas son menos comunes y ocurren con más frecuencia en personas que las han tenido anteriormente. Se desconoce la causa exacta, pero se cree que el estrés y la lesión tisular son factores que contribuyen. Ciertos casos de llagas complejas son causados por una condición de salud subyacente, como un sistema inmunológico deteriorado, problemas nutricionales, deficiencias de hierro o enfermedades del tracto gastrointestinal. Además de las llagas dolorosas, los ataques severos pueden causar fiebre, fatiga física e inflamación de los ganglios linfáticos.
Según WebMD, si una úlcera bucal es extremadamente grande o dolorosa, se extiende, dura más de tres semanas, crea dificultades para comer o beber o está acompañada de fiebre e inflamación de los ganglios linfáticos, es importante consultar a un médico o dentista para el tratamiento.