Según la Enciclopedia Británica, en términos de la teoría clásica, la radiación electromagnética se refiere a la energía que fluye a la velocidad universal de la luz a través del espacio libre o un medio material en forma de campos eléctricos y magnéticos que comprenden ondas electromagnéticas, como Ondas de radio, rayos gamma y luz visible. Las ondas electromagnéticas se caracterizan por su intensidad y la frecuencia de variación del tiempo del campo eléctrico y magnético.
Casi el 0.01 por ciento de la masa o energía del universo existe en forma de radiación electromagnética, elabora la Enciclopedia Británica. Todos los seres vivos en la Tierra dependen de la radiación electromagnética proporcionada por el sol. Los seres humanos dependen de sus diversas formas, particularmente para la prestación de servicios médicos y tecnología de comunicaciones. La radiación electromagnética hecha por el hombre también impregna la vida humana. Por ejemplo, las estaciones de transmisión transmiten ondas electromagnéticas a los televisores, y los calentadores emiten ondas infrarrojas que proporcionan calor. Las ondas de radar guían a los aviones, y los hornos de microondas utilizan ondas electromagnéticas para calentar los alimentos.
El Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley explica que el movimiento de las partículas cargadas eléctricamente produce ondas electromagnéticas, que también se conocen como radiación electromagnética, ya que irradian de las partículas cargadas eléctricamente. Estas ondas viajan a través del espacio vacío, a través del aire y a través de otras sustancias. Los científicos dicen que la radiación electromagnética actúa como ondas y también actúa como una corriente de partículas, llamadas fotones, que no tienen masa.