Las precauciones de seguridad comunes para las erupciones volcánicas incluyen mantenerse alejado de la erupción, prepararse para evacuar según las instrucciones de los funcionarios locales, conocer una ruta de evacuación adecuada y mantener suficiente gasolina en el automóvil. Además, las personas que viven cerca de un volcán activo y potencialmente explosivo deben mantener un kit de emergencia que contenga una máscara de respiración, gafas protectoras, una linterna y una radio que funcione con baterías en caso de un corte de energía.
Las rutas de evacuación apropiadas deben evitar las áreas bajas que son susceptibles al flujo de lava y lodo. Los evacuados deben usar mangas largas y pantalones para proteger su piel de las cenizas y los escombros. Como las cenizas pueden dañar los motores, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades aconsejan evitar el uso de automóviles, si es posible, durante la caída de cenizas. Si es necesario un automóvil, los conductores deben proceder lentamente y mantener las ventanas cerradas y el aire acondicionado apagado para evitar introducir ceniza en el automóvil.
Las personas que permanezcan en su residencia durante el volcán deben sellar todas las ventanas y puertas, y deben evitar el uso de aire acondicionado y sistemas de ventilación que puedan traer ceniza desde el exterior. Oculte o cubra automóviles y otros dispositivos mecánicos susceptibles a daños por ceniza. Verifique periódicamente la cantidad de ceniza en el techo y bórrela si corre el riesgo de volverse peligrosamente pesada. Los kits de primeros auxilios deben contener ungüentos para tratar las quemaduras, así como la irritación de los ojos y la nariz.