Según la Sociedad Americana de Cirujanos de Colon y Recto (ASCRS), una pila centinela es un bulto externo que se desarrolla alrededor del recto como resultado de fisuras anales. En algunos casos, se curan Su propio y no requieren tratamiento. Sin embargo, si son demasiado grandes o interfieren con el movimiento, se puede recomendar la extirpación quirúrgica.
Las pilas centinelas a menudo se confunden con hemorroides o verrugas. Sin embargo, a diferencia de las hemorroides, son típicamente indoloras. Las personas con pilas centinelas que eligen no extirparlas quirúrgicamente deben prestar atención adicional a su higiene anal. Esto se debe a que la piel adicional a veces puede atrapar la humedad que causa irritación. La piel también puede irritarse por estar sentado durante mucho tiempo o por frotarse, lo que puede causar molestias.
La Sociedad Americana de Cirujanos de Colon y Recto enumera varias opciones de tratamiento para tratar las fisuras anales y eliminar las pilas centinelas. Dependiendo de la naturaleza de la pila, los médicos pueden eliminar el crecimiento mediante la terapia de congelación o quema, mientras que otros casos pueden tratarse con cirugía directa. Independientemente de qué método de escisión se utilice, la recuperación es rápida y relativamente indolora. En los días posteriores al procedimiento, se recomienda a los pacientes que eviten la tensión y beban mucho líquido para ablandar las heces. Los médicos también pueden prescribir analgésicos y laxantes. El Instituto Nacional de Salud observa que los tratamientos caseros estándar para las hemorroides son efectivos para acelerar la recuperación, incluyendo comer una dieta alta en fibra y usar un baño de asiento para promover el flujo de sangre a la región anal.