Según la Clínica Mayo, la enfermedad de Crohn es una enfermedad intestinal inflamatoria crónica que causa la formación de inflamación en el tracto digestivo de los pacientes afectados. La inflamación puede provocar dolor abdominal, diarrea, pérdida de peso, fatiga y desnutrición. La inflamación también puede propagarse a los tejidos más profundos del sistema digestivo y causar dolor extremo y complicaciones en todo el intestino.
La enfermedad de Crohn es una enfermedad autoinmune que tiene muchos episodios de brotes, explica la Clínica Mayo. Durante un brote, los pacientes se vuelven sintomáticos y sus síntomas pueden variar de leves a graves. Los síntomas tienden a desarrollarse gradualmente a medida que la inflamación se propaga por partes del intestino delgado y grueso. Solo una parte de los intestinos está infectada en la mayoría de los pacientes con esta enfermedad. La porción más común de los intestinos que se ve afectada es el íleon del intestino delgado; sin embargo, el colon también se ve afectado en muchos casos.
Además de los síntomas en el sistema digestivo, algunos pacientes también experimentan una inflamación generalizada que afecta a su piel, ojos, articulaciones, hígado y conductos biliares, señala la Clínica Mayo. En los niños afectados por la enfermedad, se puede observar un retraso en el crecimiento.
El tratamiento para la enfermedad de Crohn a menudo implica terapia con medicamentos o cirugía. No existe una cura actual para la enfermedad, pero hay muchas intervenciones médicas que pueden reducir la inflamación en el intestino y reducir el número de brotes, afirma la Clínica Mayo.