La calcificación vascular, o calcificación de las arterias, se produce cuando se acumula un exceso de calcio en las arterias, según Healthline. Aunque a veces es inofensiva, la condición puede afectar los vasos sanguíneos y alterar la función de los órganos. p>
Como resultado de la calcificación, la elasticidad arterial y aórtica disminuye, explica la American Heart Association. Los posibles resultados de la calcificación vascular incluyen hipertrofia cardíaca, hipertensión, insuficiencia cardíaca congénita, estenosis aórtica e isquemia de miembro inferior y miocardio.
A menudo considerada como una parte normal del proceso de envejecimiento, la calcificación vascular también puede ser el resultado de lesiones y trastornos autoinmunes o genéticos que afectan el sistema esquelético y sus tejidos de conexión, informa Healthline. Las infecciones renales, cerebrales y mamarias también pueden causar calcificación vascular, al igual que la hipercalemia, la osteoporosis y otros trastornos del metabolismo del calcio.
Los pacientes con enfermedad renal crónica avanzada suelen desarrollar calcificación vascular, señala el National Institutes of Health. Los resultados más pobres acompañan la condición en los pacientes renales.
Los médicos suelen diagnosticar la calcificación vascular con rayos X o análisis de sangre, indica Healthline. El médico también puede ordenar una biopsia para evaluar los depósitos de calcio en busca de cáncer.
La calcificación es difícil de detectar, ya que la afección no presenta síntomas, advierte Healthline. El seguimiento médico regular es necesario para el tratamiento y prevención de la calcificación. La gravedad de la calcificación vascular en el momento del diagnóstico es un factor en el pronóstico del tratamiento.