El robo está prohibido de acuerdo con la ley Sharia, y el Corán aconseja que el castigo apropiado sea cortar la mano del ladrón. Amputar una mano es un asunto grave y se debe cumplir una combinación de condiciones antes de tomar una decisión sobre si amputar o no.
Hay cinco condiciones que deben cumplirse para justificar la amputación de la mano de un ladrón. La primera condición es que el artículo debería haber sido robado en secreto. Si el objeto fue tomado frente a otros como una demostración de fuerza, la mano del ladrón no debe ser amputada, ya que la víctima podría haber pedido ayuda a los demás. En segundo lugar, el valor del artículo robado debería valer al menos una cuarta parte de un dinar islámico. El Corán cita ejemplos de instrumentos musicales, vinos y cerdos.
En tercer lugar, la propiedad robada debería haberse tomado de la ubicación donde su dueño la guarda, como un armario o un cobertizo. Cuarto, el robo tiene que ser probado por el testimonio de dos testigos o por dos admisiones de culpabilidad separadas del acusado. Por último, la persona que fue robada debe solicitar la devolución del artículo robado, o la mano del ladrón no puede ser amputada. Si se cumplen las cinco condiciones, entonces, de acuerdo con la ley Sharia, la mano del ladrón debe ser amputada.