Los piojos comen pequeñas cantidades de sangre que extraen de la piel. Por lo general, se encuentran en áreas peludas del cuerpo porque sus pies pegajosos les permiten agarrarse del cabello mientras comen sangre piel.
Los piojos son criaturas parásitas que necesitan alimentarse de otros seres vivos para poder sobrevivir. Su principal fuente de alimentación está dentro de la sangre y solo podrán vivir cuando estén comiendo sangre. Los piojos se sienten atraídos por los seres humanos porque la piel cálida proporciona un lugar perfecto para que vivan, estén protegidos y obtengan la nutrición que necesitan. Debido a la forma en que viven los piojos, generalmente solo se encuentran en áreas de la piel que tienen cabello.
A diferencia de otros insectos, pero algo similar a otros parásitos, los piojos no pueden saltar ni volar. Solo se pueden transmitir de un lugar a otro cuando esas cosas entran en contacto cercano. Una persona que tiene piojos puede poner su cabeza en otra persona y esa persona tendrá piojos. Los piojos también pueden viajar por cortos períodos de tiempo en la ropa de las personas y se encuentran comúnmente en los sombreros. Esta es una de las formas más comunes en que los piojos se transmiten a los niños.